Elijamos nuestros soundtracks mortuarios
no dejemos a la muerte empañarnos
retirémonos como dos reyes, como dos dioses
que han desarrollado tolerancia
a las ofrendas más precoces,
distribuyamos el tiempo
entre saber lo que estamos sintiendo
y que en el pecho de la virgen
solo existe un pequeño cofre,
y si nos tomamos de la mano
quizás no seamos tan libres
como uniendo nuestros labios
podemos estar parados presenciando
ese pequeño devenir de la musica poeta
esa pequeña fracción de agua
que empapa los desiertos adecuados.
Golpeemos a los que amamos con pétalos de rosa
con besos apasionados
con abrazos acalorados
con todo, menos con hipocresía y falsedad
olvidemos todos aquellos recursos
como develar los secretos antes de ser descubiertos
como aceptar al cristo, antes de estar muertos
tomemos entre nuestras manos
la lana y las agujas
del reloj, de bordado, del pajar... no importa
pero sacrifiquemos esa pequeña herida
para seguir caminando, paso a paso
el hermoso/terrorifíco trance de la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario